EL LÍMITE DEL BIEN - LA FRONTERA (4:39)
Escucha bien, mi viejo amigo
no sé si recordarás
aquellos tiempos ahora perdidos
por las calles de esta ciudad.
Leímos juntos libros prohibidos
creímos que nada nos haría cambiar
vivimos siempre esperando una señal.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
Es duro estar tan abatido
cuando no sientes el dolor
es como clavar un cuchillo
en lo más hondo del corazón.
Escucha bien, mi viejo amigo
nunca olvidé nuestra amistad
la vida es sólo un juego
en el que hay que apostar, si quieres ganar.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
No es difícil encontrar
el paraíso en la oscuridad
la fortuna viene en un barco
sin rumbo y sin capitán.
Escucha bien, mi viejo amigo
si algún día nos volvemos a ver
sólo espero que todo sea como ayer.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
...........................................
no sé si recordarás
aquellos tiempos ahora perdidos
por las calles de esta ciudad.
Leímos juntos libros prohibidos
creímos que nada nos haría cambiar
vivimos siempre esperando una señal.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
Es duro estar tan abatido
cuando no sientes el dolor
es como clavar un cuchillo
en lo más hondo del corazón.
Escucha bien, mi viejo amigo
nunca olvidé nuestra amistad
la vida es sólo un juego
en el que hay que apostar, si quieres ganar.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
No es difícil encontrar
el paraíso en la oscuridad
la fortuna viene en un barco
sin rumbo y sin capitán.
Escucha bien, mi viejo amigo
si algún día nos volvemos a ver
sólo espero que todo sea como ayer.
En el límite del bien (el límite del bien)
En el límite del mal (el límite del mal)
Te esperaré, en el límite del bien y del mal. (bis)
...........................................
NOTA DE EL MAR Y YO: con el paso del tiempo (de la canción, y de mí misma), la letra adquiere matices que todos vivimos en propias carnes, cada uno dentro de su historia particular...
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5 comentarios:
Te noto un poco apocalíptica en estos últimos dos posts, ¿estas bien?
espero que solo sea existencialismo ¡ANIMO!
Con lo observadora que soy y lo que cuido de no transmitir mi estado de ánimo a los blogs (cada uno tiene "su cosas"), y fíjate que no me había dado cuenta. Efectivamente, qué ojo clínico que tienes ;)
Estoy con una fuerte crisis de dolor por culpa de la exploración de espalda que me hizo el 9 de julio la doctora de la inspección médica. Esto me está dejando anímicamente mal (la¨"última crisis" de dolor agudo me duró de agosto 2001 a diciembre 2007, pues a lo que parece tengo un gen que "mantiene" el dolor, así que nunca sé si el dolor que aparece, nuevo o porque alguien me lo provoca -como esta doctora-, va a ser "para siempre" o para sólo un tiempo más o menos largo... así que esta incertidumbre me deja KO anímicamente. Y no puedo tomar medicación para mitigar los dolores).
Llevo así (con dolor horroroso general, pero sobretodo el de la lumbalgia crónica y femur/pierna izquierda) ya un mes. Pero bueno, me ha emocionado tu correo en que te dabas cuenta y eso anima un poquillo :) La gente no suele ver más allá de sus narices (o si lo ve, mira hacia otro lado).
En cualquier caso sigo con ganas de asesinar a esta doctora, pero bueno, jeje (si tuviera fuerzas la denunciaba, porque no hay derecho que para una exploración que ya en los informes viene qué me pasa, se me haga pasar por estas crisis, que además no sé hasta cuando tengo o si "me quedaré ya así", y encima la tipa ha mentido al redactar su informe de valoración: increible pero cierto, lo que desanima a cualquiera).
Nada, no te preocupes, espero que el tema pase, en cualquier caso. Como se suele decir, "Pase lo que pase, en 100 años de todos modos, todos calvos" :)
Un abrazote grande, y de veras que me ha emocionado tu correo. A ver si la crisis pudiera amainar porque la verdad es que "esto" es durillo de llevar.
Mariajo, aunque creas que no puedo saber, ni nadie como te sientes yo he sentido algo parecido, lo sentí durante unos años, años en los que estuve borrado de la vida. recientemente a raiz de una discusión con mi mujer en la que me dijo que debría "abrir mi cajita de mierda", porque de vez en cuando dejo recaditos encriptados sobre mi en el blog, sobre esta época. He decido colgar en una nueva etiqueta lo que me pasó en esos años, se trató de un dolor psicologico, fisico y moral, que aún hoy colea y que a pesar de haberse esfumado me ha dejado comportamientos y sentimientos, reflejos condicionados que aún me provocan miedos. Yo me pase unos años muy enganchado a la heroina, ya esta, ya lo he dicho, tal vez he comenzado por ti porque en tu estado seas capaz, mejor que nadie, de comprender el sufrimiento, ahora pretendo reunir el valor para contar mi historía a aquel que quiera leerla.
Un fuerte abrazo.
Tienes que seguir esta nueva etiqueta y comentarme, tu visión me interesa mucho, puesto que lo mio fue algo que he superado en lo fisico y en lo social, aunque en lo psicologico y lo moral sigo trabajando, pero una persona que vive cautiva sin quererlo de un mazazo puede aportarme mucho, son los mayores los que pueden guiar a los niños. No pienses en estos dos comentarios como en algo triste, en realidad pretende ser una superación, de ti espero el ejemplo de una persona que no puede elegir y por tanto con una visión cenital de los problemas que da esa excepción.
Otro abrazo
gracias Joako por hacerme partícipe de algo tan interno a tí, y por tanto arriesgarte a quedar tan "expuesto" al ojo humano, en este caso el mio.
Entrar en ello no sé qué te llevaría, pero en todo caso para poder salir hacer falta mucha decisión y sobretodo mucha, pero mcha voluntad, además de reconocer "el problema" (lo que conlleva aceptar mirarse dentro de sí, analizarse, evaluarse, y tomar decisiones -y con ello aceptar esa responsabilidad y las que por ende conlleva más tarde cada una de las decisiones dirigidas a hacerte con las riendas de tu vida, de nuevo, afortunadamente).
Es cierto que hay que "trabajar" toda la vida para no hundirse en la mierda (personal y la del entorno), cada uno desde su perspectiva y circunstancias personales, y eso conlleva cada cierto tiempo irse reevaluando y viendo qué es "lo que falta" para estar lo más cerca del Equilibrio personal...
Está bien (muy bien) que decidas hablar de ello abiertamente. Yo siempre he sido de hablar claro, aunque intentando no hacer daño aún sabiendo que a veces me cuesta escoger las palabras y por otro lado mi timidez haga que para aclarar "algo", acabe por coger el camino de en medio (o sea, pienso en cómo decir las cosas, pero si es algo que necesito soltarlo cuanto antes -por salud mental mia-, a veces acabo soltando las cosas "tal cual").
Hablar abiertamente de las cosas conlleva que quien ya te tenía cariño te lo seguirá teniendo y valorará tu sinceridad y deseos de mejorar a través de la apertura de esa espita dolorosa de tu vida. Y quien, conociéndote previamente, ahora cambie de opinión y te juzgue negativamente o cambie su actitud para contigo simplemente no merecía la pena y mejor saberlo ahora que no vivir en una mentira social con estas personas, de por vida.
En cualquier caso, es muy valiente exponerse "a los demás", sobretodo porque la mayoría de las veces los "demás" no merecen que uno sea a abierto y sincero (la mayoría no son ni sinceros para consigo mismos, así que el ver a alguien que les venga de frente renovando el aire viciado que les rodea (por educación, cultura, intereses personales, etc.) pueden hasta verlo como una "amenaza" a su status egoista e hipócrita.
Por ello, creo que "salir" y exponerse, en la parte del círculo en que quieras hacerlo, independientemente de "los demás" puede ser bueno para tí. Y esa sería (tal como yo lo veo y teniendo en cuenta que no te conozco por lo que no puedo más que valorar de manera general), la óptica por la que transitar en este camino.
Pero cuidado, por la misma regla de tres, habrá quien se merezca tu sinceridad al respecto, y quien no (y a estos últimos, mejor estar calladitos porque cualquier cosa que se interprete como "señal de debilidad" para ellos podría ser la señal de creer que es una buena oportunidad para atarcarte o al menos para tener una herramienta con la que hacerlo cuando lo "estimen" oportuno (sin valorar que "aprovechar" este tipo de cosas para echarlas en cara es ruin y falto de ética). Por lo que he visto en tu espacio eres una persona inteligente e inquieta intelectualmente, por lo que tú mejor que nadie sabrás a quién sí y a quién no hacer partícipe de tu Yo Interno y de "esos años". No todos se lo merecen. A veces, nadie lo merece, y entonces en esos casos hay que aprender a "vivir" sin más ni más, y sin ayuda ni apoyos de nadie.
No sé si algo de lo que te haya podido comentar en estas letras te pueda servir. Me imagino que todo son cosas muy lógicas que caen por su propio peso por lo obvias que son. Al contrario de lo que piensas, objetivamente no puedo aportar nada y menos últimamente. El dolor no me deja pensar más allá tampoco. Mi proceso es distinto al tuyo: yo no puedo salir de él por mucho que quiera. Y ni la voluntad, ni las ganas, ni la curiosidad por las cosas me han servido. El nulo apoyo e incluso la mala fé y el rechazo del entorno incluidos algunos vecinos me han acabado de dar la puntilla así que sinceramente no puedo aportar mucho, aunque siempre se me ha dicho que tengo la cabeza muy bien amueblada y esas cosas :)
En todo caso, mi único consejo, si es eso lo que me pides, dentro de que no sé ni lo que te he escrito ya, es que reflexiones ante los comentarios de la gente de tu entorno que te conoce y te quiere, pero además de ello tienen buen juicio y sus "consejos" no son en realidad respuestas condicionadas a sí mismos sobre qué sería lo mejor para "ellos" y qué harían "ellos" en tu situación, sino que tengan empatía suficiente para intentar verlo desde la óptica de qué sería lo mejor "para tí", desde tu óptica y forma de vida :)
En el aspecto de quererte sinceramente y de aprender mucho de ellos, el regalo más sincero en palabras y gestos es el que viene de los niños antes de que empiecen a coger actitudes y normas de adultos. En ese aspecto, mientras los dejaron entrar en mi casa, tenía unos vecinitos (unos locos bajitos, como diría Serrat) que siempre alegraban el alma, y salían con lecciones aprendidas. Aparte de que, si te quieren, te quieren, no hay más dobleces. Aprovecha ese filón que tienes en tu casa (y el que está por llegar prontito) ;)
Bueno, y dicho esto, acabo con la frase de aquel que decía lo de "Sólo sé que no sé nada" (Socrates, creo), que en mi caso es más que cierto. Un abrazo y cuídate mucho,
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